Inicio » Nutrición oncológica » Cáncer de mama
Cáncer de Mama: Dieta y Alimentación
La consulta nutricional para personas con cáncer de mama se centra en un acompañamiento estrecho enfocado a mejorar su estado nutricional y composición corporal, que pueden verse afectados por la enfermedad y los tratamientos oncológicos.
Se busca que la persona aprenda a comer sin miedo según el momento de la enfermedad, esquema de tratamientos y, por supuesto, sus características individuales (gustos, preferencias, cultura, horarios…) y que seguir las recomendaciones sea lo más sencillo posible.
Síntomas del cáncer de mama
- Nódulo palpable en la mama
- Retracción (o contracción) del pezón
- Alteraciones en la piel de la mama
- Deformidad o hendiduras en la mama
- Erosiones en la piel
- Supuraciones del pezón
Incidencia y factores de riesgo
Según el último informe publicado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) en 2023 se estima que este año habrá 35.001 casos nuevos de cáncer de mama y se dará mayoritariamente en mujeres.
Los principales factores de riesgo modificables para padecer cáncer de mama son el exceso de grasa corporal, consumo de tabaco y alcohol, sedentarismo, niveles elevados de estrés, patrón de alimentación poco saludable y exposición prolongada a estrógenos. Mientras que algunos de los factores de riesgo no modificables son el ser portadora de mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2, tener mayor edad, presentar elevada densidad mamaria y tener historia familiar de cáncer de mama en familiares de primer grado.
Recaídas en el cáncer de mama
Uno de los principales factores de riesgo para las recaídas de cáncer de mama es el sobrepeso y/u obesidad (entendido como un porcentaje de grasa elevado y no como un tamaño corporal mayor).
Por esta razón, uno de los objetivos principales en la consulta de nutrición con personas supervivientes del cáncer de mama es adquirir hábitos alimentarios saludables y aprender a cómo mantenerlos a largo plazo mediante educación nutricional. Esto les permitirá mantener una composición corporal saludable y evitar la ganancia de grasa corporal.

La nutrición contra el cáncer de mama
Una dieta óptima contribuye a mantener un buen estado nutricional, una mejor función inmune, una composición corporal adecuada, una mejor tolerancia a los tratamientos oncológicos y, en consecuencia, una mejor calidad de vida.
Mi objetivo es ayudarte a adaptar tu alimentación al momento de la enfermedad y los tratamientos de forma sencilla, siempre teniendo en cuenta tus objetivos, preferencias y contexto.
Además, busco que comprendas el porqué de cada recomendación, resolver todas las dudas que te surjan, derribar mitos que hayas podido leer o escuchar y, con todo esto, fomentar tu autonomía para que tomes decisiones alimentarias con total libertad, conocimiento y sin miedo.
El impacto de una buena dieta en el cáncer de mama
Llevar una dieta controlada durante el cáncer de mama es fundamental debido a la necesidad de contrarrestar los cambios que se producen en el organismo derivados del propio tumor y/o de los tratamientos. Por ejemplo, uno de estos cambios es la pérdida de masa muscular y aumento de grasa corporal, que pueden derivar en un peor pronóstico y menor tolerancia a los tratamientos. Por esta razón, una dieta adaptada y enfocada a tratar esos cambios va a tener un impacto positivo en la evolución de la enfermedad y, por ende, en la calidad de vida de la persona.
Todos los objetivos nutricionales marcados dependerán del tipo de tumor, el estadio, los tratamientos oncológicos, el estado de salud general y, por supuesto, las necesidades de la persona.
Cómo detectar el cáncer de mama
Una vez existe sospecha de cáncer de mama se realizan pruebas de imagen como mamografías, ecografías, RMN, pero también debe estudiarse el tejido de la zona sospechosa a través de una biopsia.
La detección precoz es fundamental para un mejor pronóstico y, por ello, es importante realizar autoexploraciones periódicas de las mamas y mamografías anuales como pruebas de cribado.
Tipos de cáncer de mama
Existen diversos tipos moleculares de cáncer de mama: HER2+, luminales (tipo A y B) y triple negativo, que difieren en la agresividad del tumor y otras características moleculares que determinarán la elección de tratamientos y pronóstico.
A nivel histológico, los tumores pueden originarse en los conductos mamarios (carcinoma ductal) o en los lóbulos (carcinoma lobular). Además, el tumor puede clasificarse en función del estadio (0-IV).
Todo ello se estudiará y tendrá en cuenta la hora de establecer los objetivos nutricionales y elaborar las pautas dietéticas.

Dónde metastatiza el cáncer de mama
El cáncer de mama metastatiza frecuentemente en los siguientes órganos: ganglios, hueso, hígado y pulmón, aunque también puede darse en otras zonas como SNC, piel, tubo digestivo…
Según detalla la Guía GEICAM de Práctica Clínica, el cáncer de mama metastásico (CMM) afecta a un 5-6% de las personas con cáncer de mama en el momento del diagnóstico y sobre un 20-30% de pacientes con cáncer de mama lo acabarán desarrollando. Es una enfermedad que actualmente no tiene cura, el tratamiento es diferente al resto de cánceres de mama y la meta es lograr una mayor supervivencia con la mejor calidad de vida posible. En relación con la alimentación de las personas con cáncer de mama metastásico, los objetivos nutricionales también difieren de los otros tipos y se debe atender las necesidades específicas derivadas de los tratamientos oncológicos elegidos.

Dietista Nutricionista, especializada en: Nutrición Oncológica, Nutrición Clínica y endocrinología y Pérdida/ganancia de peso
Qué dicen de mí